martes, 1 de julio de 2008

El siete de oro

El domingo, después de madrugarme con la noticia, estuve como zombie todo el día. Miré tele. Mucha tele. Debo haber estado unas seis horas delante de la pantalla, viendo "La era del hielo" primero y "Ciudad de Dios" después. Y bueno, chicos, qué quieren... las agarré justito al principio.

Finalmente, a la noche, hablando con un amigo, le conté la noticia y me largé a llorar. Me di cuenta de que había estado como pelotuda todo el día, tratando de no pensar en los cumpas, sumergiéndome en la nada televisiva. A las 4am, mientras repasaba algo de la Unidad VI, escuché que mi mamá se levantó y se calentó un café. De modo que fui a la cocina, le conté lo que había pasado, y tuve una de esas charlas tan necesarias y esclarecedoras que a veces suelo tener con mi vieja. Qué sería de mi vida sin ella...

De modo que cuando llegó el lunes, y con él, el segundo parcial de Técnicas, estaba más en el horno que nunca. Tan en el horno que ni siquiera encontraba las unidades IV y V, con lo que empiezo a temer la posibilidad de que nunca las haya comprado. Pero bueno. ¿Qué podía hacer? El parcial (oral) era en unas horas. Agarré mis cosas, me fui a la facu, y rogé absorver conocimientos mientras iban pasando mis compañeros a dar el oral.

Mientras el 65 avanzaba con su lenta parsimonia, consideré la posibilidad de no rendir. Cosa que he considerado en todos los parciales que rendí en este cuatrimestre. Ahogué en voluntad mis intentos de autoboicot, y cuando llegué al aula me anoté en la lista. Era la número 38. Gracias a Dios.

A medida que iban pasando mis compañeros a rendir, yo seguía repasando con los que estaban afuera. Debe ser la técnica de estudio más vieja de la historia. Y a medida que iban saliendo, los acribillábamos a preguntas sobre qué les habían tomado. En general eran más o menos lo mismo. Técnicas de muestreo, alguna otra pregunta teórica, y leer un cuadro bivariado. Ajá, bien. Eso puedo llegar a responderlo. Repasé entonces esas cosas, y paré bien la oreja cuando alguien repasaba al lado mío.

Así, los estudiantes iban saliendo, y la verdad, eran buenas notas. Me confié, tranquilicé, y ya no quise saber más nada. Sólo quería que llegaran al número 38, pasar, que me dieran las consginas e IRRRRME!

Finalmente me llamaron. Las preguntas (en papelitos diferentes) eran las siguientes:

1) Diga qué técnicas de muestreo conoce y desarrolle una de ellas.

2) Identifique qué tipo de preguntas son las siguientes:
a- ¿Usted diría que está de acuerdo, en desacuerdo o indiferentes sobre un tema que no recuerdo?
b- ¿Qué opina sobre tal cosa?
respuesta 1 (pasa a pregunta c)
respuesta 2 (pasa a pregunta d)
respuesta 3 (para a pregunta e)

3) a-Lea el siguiente cuadro y extraiga una hipótesis del mismo.
b- Identifique las variables, sus categorías y su nivel de medición.
c- Identifique las unidades de análisis.
d- Según la lectura del cuadro, ¿se confirma o refuta la hipótesis que planteó?


La tranquilidad vino a mi mente.
La primera pregunta la tenía re clarita.
La segunda, bastante. Media hora atrás una chica había estado explicando la diferencia entre una pregunta con horquilla y una con filtro. Agradecí su pedagogia desde el fondo de mi alma.
Y la lectura del cuadro era en lo que mejor estaba.
Finalmente me llamaron. La profesora me reconoció y lo primero que me dijo fue

-Ah, a vos te fue bien en el primer parcial, ¿no?
-Tengo un 6...
-Ah, qué lástima... entonces no vas a poder promocionar.

A medida que iba respondiendo, demostré una confianza y una seguridad en mí misma que ningún docente del mundo hubiera creído que perdí las unidades IV y V. Tuve pequeños errores, pero los reconocía humildemente y seguí avanzando. Hasta que, finalmente, un rayo de sol se abrió paso entre la derruida arquitectura de la facultad, y la profesora dijo

-Bueno, Lucía, muy bien... tenés un 7. ¿Nos vemos en el final?

2 comentarios:

Pelos Lokos dijo...

FELICITACIONESSSSSSSSSSSSSS

Giselle dijo...

Como se safa estudiando en los pasillos, pobres de los que pasan a rendir primero y son los conejillos de indias nuestros.


Besotes pequeña ahora estudie para el coloquio!